La música marinera
La música marinera
Perder canciones
Que la nube viola es simplemente la otra manera de decir agosto, un nombre, otro nombre para el intervalo, que la barca no es la barca sino su singladura en el mar, mirarla muy despacio desde la orilla de un tiempo impreciso, cuando el destello de la mañana te parece igual al de todas las mañanas, al de todas tus canciones favoritas, y solo entonces la barca va a sonar como la barca, cuando la música marinera de tus cosas se impone al horizonte y sube mucho sobre mi cuerpo y casi ya puedo cantar, por lo menos me entran esas ganas gigantes que no muy a menudo nos visitan, y son tan fuertes e imaginan tanta energía, es que casi me atrevo a cantarte desde el filo del acantilado, al borde de Europa, la última esquina del mar, cuando la vista no puede hacer otra cosa sino perderse muy lejos, muy contigo, que ésta es la playa que conociste, y cuando la nube viola vuelve a pasar yo sé que aún era verano, que aún había verano, que casi estamos ya, que ya nos vemos, que ya nos perderemos en las canciones, que habitamos la música marinera.
Hugo Milhanas Machado
Fotografía: Isabel Milhanas Machado
Publicado en octubre 2015