No estaba muerto, que estaba de parranda

Crítica
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No estaba muerto, que estaba de parranda

La viola de gamba en Gran Bretaña desde Purcell a Dolmetsch

Life after Death: The Viola da Gamba in Britain from Purcell to Dolmetsch, Peter Holman, The Boydell Press (2013), ISBN: 978–1–84383–820–3.

¿Realmente desapareció la viola de gamba de la vida musical inglesa en la última década del siglo XVII? Siempre se ha pensado que ocurrió así y que Henry Purcell fue el último compositor que creó obras para el instrumento. No hay duda de que su declive había comenzado hacia 1660 durante el periodo de la Restauración de la monarquía inglesa, sin embargo, tal y como Peter Holman demuestra en su libro, reeditado este año en rústica por The Boydell Press, ésta no desapareció por completo sino que simplemente cambió su función pasando de instrumento de conjunto a solista. Renovarse o morir.

A través de una exhaustiva investigación basada no solo en fuentes musicales y documentales primarias sino también en los propios instrumentos que han sobrevivido al paso del tiempo, Peter Holman nos relata algunos de los episodios vitales fundamentales de la viola de gamba desde el periodo posterior a su “edad de oro” hasta los inicios de lo que se ha denominado Early Music con los primeros conciertos del conjunto de violas de Arnold Dolmetsch en Londres en 1890. Holman, profesor de Musicología en la Universidad de Leeds y director de la agrupación The Parley of Instruments, nos muestra cómo la viola de gamba se tocaba y, aún más, se componía para ella en círculos musicales de músicos inmigrantes como Handel, o cómo pasó a formar parte de un conjunto de instrumentos tenidos por “exóticos” a mediados del siglo XVIII. En otros capítulos vemos la viola de gamba como emblema de “sensibilidad” entre la aristocracia y los círculos artísticos e intelectuales del momento; no en vano era el instrumento predilecto de conocidos personajes como Laurence Sterne, Benjamin Franklin, Thomas Gainsborourg. Asistimos asimismo al papel fundamental en la revitalización de la viola de gamba, un instrumento que en la segunda mitad del siglo XVIII estaba pasado de moda, que jugaría un gran papel para el que fuera alumno de J. S. Bach, el compositor alemán Charles Frederick Abel, a través de los conciertos semanales que organizaba junto a John Christian Bach y su virtuosismo como intérprete de este instrumento.

Escrito con un estilo sencillo –no es necesario un gran dominio de la lengua inglesa para sumergirse en sus páginas–, un buen aparato crítico, ejemplos musicales, una extensa bibliografía e índice onomástico, el libro de Holman posee cualidades suficientes como para convertirse en texto de referencia sobre la viola de gamba no solo en Inglaterra, tal y como indica su título, sino en el mundo occidental.

Ana M. del Valle Collado

Publicado en verano del 2013″ id=”mes” alt=”Verano” border=”none”/>

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